31 julio 2016

Memorias de una zorra

Autor: Francesca Petrizzo
Editorial: Ediciones B
País: México
Año: 2010
ISBN: 978-84-666-4466-2
Páginas: 290
 e-book: $59  en Gandhi

SINOPSIS
Una nave frente a las costas griegas. A bordo, una mujer trata de distinguir el perfil del Peloponeso en la luz incierta del crepúsculo. Es Helena de Troya, devuelta a su patria por su marido, Menelao, después de la destrucción de la orgullosa ciudad.
Al viento y a las olas, ella confía su propia historia. Y su voz, melancólica y vibrante, nos habla de una criatura sedienta de amor, llena de pasión y sensualidad, pero obligada a casarse con un hombre al que no había elegido. Una decisión fatal, de la que nacerán lutos y tragedias, porque Helena buscará entre otros brazos aquello que le ha sido negado.
Francesca Petrizzo despoja a sus protagonistas del halo legendario, le da carne y alma. La figura de Helena irrumpe en el relato con la fuerza, la rabia y la dulzura de un personaje auténtico, arquetipo de todas las mujeres que a través de los tiempos ha opuesto las razones del corazón a las del poder Sostenido por una escritura lírica, musical y, por momentos, hipnótica, éste es el sorprendente debut literario de una jovencísima escritora.
¿Qué encontré?
Esta es una historia sobre Helena de Troya, lo que sentía y lo que sufría, no se trata de la Helena de la Iliada, sino una nueva, una Helena inventada por Petrizzo la que nos relata una vida de reina muy cercana al dolor.
OPINIÓN
Me cuesta mucho trabajo realizar esta reseña porque si bien el libro no ha sido lo que esperaba, no lo odié. Haciendo un balance creo que son más las cosas negativas que las positivas, y por eso el libro se fue opacando tanto en mi lectura.
Supe de este libro hace mucho tiempo cuando recién llegaba como novedad a México, desde que lo vi lo deseé, fue el precio lo que me impidió tenerlo y hasta el último remate de libros pude colocarlo en mi librero. Agradezco no haber gastado en él.
Siendo la Iliada y la Odisea grandes clásicos de la humanidad, pienso que siempre terminamos volviendo a ellos de una u otra manera constantemente, sus aventuras, sus batallas y sus personajes son inolvidables, por esa razón también este libro llamó mi atención. Helena, la causante de esta guerra necesitaba su propia voz.
Para aquellos que nos encanta volver a la Iliada, o nos enamoramos de alguno de sus personajes, este libro es la oportunidad de volver a ese mundo, podemos volver ahí con una voz fresca, nueva, incluso relajada, la autora nos lleva de nuevo a ese sitio y por eso la historia es buena, por el simple hecho de estar ahí.
Otro acierto es que la autora dejó  de lado las divinidades, haciendo completamente humana la historia. La Helena de la portada nos atrapa, nos promete una historia en la que nos contará su historia y así es, podemos conocer su infancia, su juventud, sus amores y su edad adulta.Todo esto es para reconocerle a la autora pues a una corta edad se atrevió a dar una salto enorme escribiendo sobre una historia que no solo tiene cientos de años, es conocida por casi todos y muy resguardada por sus fanáticos.
Ahora bien, los errores históricos son notables, si hay aquí algún lector que le guste la fidelidad a la versión original, debo decirle que este libro no es para él o que se acerque bajo esta premisa. Infiero que la autora lo hizo en plena conciencia para poder llevar la historia por el camino que quería darle. Quizá entonces, hizo falta un prefacio aclaratorio de la autora.
El Héctor de esta novela, desde mi parecer, no se acerca ni le hace ningún homenaje al Héctor de la Iliada (que es mi favorito); Sin comparar ambas historias, porque no hay comparación, considero que la autora se enfocó tanto en hacer que los personajes tuvieran nuevas versiones de sí mismos para que encajaran en su historia, que llegó a mutilar al propio Héctor y otros personajes. Aunque esa fórmula sí fue efectiva en Menelao, Casandra, Eneas y Príamo.
Por mi forma de ser no pude encontrar en Helena un vínculo ya que me desesperaba que fuera "una Helena fuerte y débil, sabia y desquiciada, atormentada y valiente" porque no me aportó nada, me quedó corta. Hubiera preferido mil veces que fuera o una, o la otra, pero nunca ambas. Siendo Helena quien es, los lectores, le hubiéramos perdonado todo sólo por escuchar su historia.
Y es que esta dualidad, la justifica en todo momento o trata de dar una explicación sensiblera a sus actos, cuando ella podía hacer, pensar, decir o ser cualquier cosa en su PROPIA HISTORIA. Pero el apodo de Zorra permaneció tanto que despojó a Helena de toda esa inteligencia que venía mostrando en las páginas del libro para dejarse llevar sólo por su instinto carnal, y ¿Acaso el propósito de la historia no era decir que había una Helena más allá del sexo? Entonces que alguien me explique cómo, en plena guerra, ella podía ponerse a coger como si nada. 
Helena, sufría de manera insoportable la guerra que ella causó y quizá ahí hubo una ausencia que Petrizzo pudo haber abordado muy bien, pero que dejó ir.

Yo lo compraría porque...
Quizá al lector de esta reseña si le guste la Helena que describo, así que no me queda más por decir, no fue mi libro favorito pero estoy segura que alguien la valorará por su fuerza emocinal.

LO QUE ME GUSTÓ

"Sola, Helena,  pero no aúlles, rómpete las uñas sobre estas escaleras de piedra, respira, Helena, y no pienses en quien debería estar aquí y, en cambio, está al otro lado del mar".

"Yo había tenido la posibilidad de desear otra vida, y me la habían arrancado de las manos. Era como ellos, claro, carne y hueso unido por la piel, pero en mí lloraba la añoranza por aquello que habría podido ser y no había sido".

"En mi regazo seco sentí correr el tibio humor de un deseo que había olvidado, sentí que mi piel se encendía, mi carne palpitaba. Prisionera de sus ojos imaginé aquellas manos, aquel cuerpo encima y dentro de mí, deseé su lengua cálida en mi boca, el contacto de sus labios suaves".

"Cuatro meses permaneció Paris en Esparta, y para cada día tuvo un vestido nuevo que quitarme con los dientes, cada día una nueva joya que caería sobre el mármol con la violencia de lo que llamaba amor".

"Los hombres son siempre iguales, sólo creen lo que quieren, y sólo quieren lo  que pueden soportar".

"El amor de los mortales es poca cosa y, sin embargo, calienta, incluso de lejos".

¿Ustedes qué opinan?
Nos estamos leyendo...
Ni*

1 comentario:

  1. Hola, hace años que sé de este libro, creo que me lo mencionó alguna profesora de la preparatoria, igual que tu siempre que lo veía estaba super caro y no me animaba a comprarlo, la verdad no me imaginé que distara tanto de la verdad, y siento que me llevaría un gran disgusto con él, por lo que no me arrepiento de no haberlo comprado jeje... Saludos, muy buena reseña :D

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